Las autoridades de Nueva York anunciaron este viernes la desmantelación de una red internacional dedicada al robo de identidades y la falsificación de tarjetas bancarias en Queens, en lo que supone la mayor operación de este tipo en la historia de Estados Unidos.
La Fiscalía de Queens informó de que la red está integrada por 111 sospechosos, vinculados con países de África, Asia, Europa y Oriente Medio, que supuestamente se dedicaban a sustraer los datos personales de consumidores europeos y estadounidenses para comprar artículos de lujo que luego vendían en Internet.
Los sospechosos, de los cuales ya han sido detenidos 86 y que forman parten de cinco grupo criminales diferentes, causaron a personas, empresas minoristas e instituciones financieras pérdidas superiores a 13 millones de dólares durante los últimos 16 meses, según la Fiscalía.
La inmensa mayoría de los acusados eran dependientes, empleados de banca o trabajadores de restaurantes que se apropiaban de la información de las tarjetas bancarias de los clientes para suplantar después su identidad y adquirir todo tipo de artículos de lujo y productos de alta tecnología hasta billetes de avión.
"Se trata del mayor caso de fraude y robo de identidadcon el que han tenido que lidiar las fuerzas de seguridad y uno de los más sofisticados", afirmó el fiscal Richard Brown, quien recordó que son dos de los delitos de mayor crecimiento en EEUU, que afectan a millones de personas y dejan pérdidas de miles de millones de dólares.
Según la Fiscalía, muchos de los acusados se pasaban noches en hoteles cinco estrellas, alquilaban coches de lujo e incluso viajaban en aviones privados, y además salían de compras a todo tipo de tiendas en ciudades como Nueva York, Miami, Los Ángeles o Chicago.
"Incluso después de que los culpables hayan sido detenidos y juzgados,sus víctimas seguirán teniendo que hacer frente a las dificultadespara reparar sus créditos y su reputación financiera, algo que en algunos casos puede llevar incluso años", añadió el fiscal Brown.