El Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires (Argentina) recomendó recientemente que los nacimientos se realicen dentro de las instituciones de salud acreditadas.
En años recientes se comenzó a difundir como una práctica benéfica el parto domiciliario con el acompañamiento de parteras, pero sin intervención del resto del equipo de salud. Pronto alcanzó muchos adeptos, pero también muchos críticos. "Estamos convencidos de que el parto, para que sea seguro, debe ser institucionalizado porque se trata de un evento impredecible, en el que pueden ocurrir emergencias como hemorragias, la necesidad de una cesárea urgente u otros contratiempos que requieren de todos los recursos de una maternidad", explicó el ministro, Alejandro Collia.
"Una maternidad segura es aquella cuyo personala dopta prácticas de probada eficacia, con capacidad para atender una emergencia y derivar en tiempo y forma a la embarazada y al bebé, facilitando el acceso inmediato a prácticas quirúrgicas y anetésicas, así como asistencia neonatal inmediata, si hicieran falta," acotó el ministro.