El Síndrome de Ulises, también conocido como síndrome del emigrante con estrés crónico y múltiple, es un trastorno mental que afecta a las personas que no se adaptan a su nuevo entorno,especialmente a los inmigrantes.
Es un síndrome de naturaleza psicológica que se caracteriza por un estrés crónico que viene asociado a la problemática de los emigrantes al afincarse en una nueva residencia. El nombre viene variado del héroe mítico Ulises el cual, perdido durante muchísimos años en su camino de vuelta a Ítaca, añoraba su tierra de origen pero se veía imposibilitado de volver a ella.
La Odisea de Ulises al querer regresar a su natal Ítaca. Pese a que vivió siete años en el edén con su bella amante Calipso, debido a su añoranza y recuerdos, él opta por regresar a casa con Penélope, su esposa, para lo cual tendrá que sortear varias batallas.
Su descubridor, el doctor Joseba Achótegui, psiquiatra del SAPPIR.
Existe una relación directa e inequívoca entre el grado de estrés límite que viven estos inmigrantes y la aparición de sus síntomas psicopatológicos.
El Síndrome del Inmigrante con Estrés Crónico y Múltiple se caracteriza, por un lado, porque la persona padece unos determinados estresores o duelos y, por otro lado, porque aparecen un amplio conjunto de síntomas psíquicos y somáticos que se enmarcan en el área de la salud mental.
Factores vinculantes
- Soledad: al no poder traer a su familia- Sentimiento interno de fracaso: al no tener posibilidad de acceder al mercado laboral- Sentimiento de miedo: por estar muchas veces vinculados a mafias- Sentimiento de lucha por sobrevivir.
Se calcula que en España puede haber unas 800.000 personas afectadas por esta enfermedad.
Sintomas
- Estrés- Tristeza profunda- Culpa- Cambios de humor- Desorientación- Dolor de cabeza, etc
- Estrés- Tristeza profunda- Culpa- Cambios de humor- Desorientación- Dolor de cabeza, etc
Tratamiento
La consecuencia más grave del síndrome es la soledad: Para atender estos casos, se recomienda participar en talleres de autoestima, apoyo psicológico y en los peores casos se deriva a profesionales.
La consecuencia más grave del síndrome es la soledad: Para atender estos casos, se recomienda participar en talleres de autoestima, apoyo psicológico y en los peores casos se deriva a profesionales.