Definitivamente. Pueden caer por exceso de estrés, por una mala alimentación o por la aplicación de cosméticos. También pueden presentarse efectos adversos como enrojecimiento del ojo, visión borrosa y pigmentación.
Las pestañas constituyen un órgano de defensa para el ojo, al protegerlo del polvo y la temperatura, además de graduar la luz, por ello se debe tener cierto cuidado para mantenerlas en buen estado, ya que el estrés, la mala alimentación, la aplicación de químicos como desmaquillantes, rimel y delineadores pueden ocasionar su caída. Así lo informó la Jefa del Servicio de Dermatología del Hospital General de México (HGM), Rosa María Ponce Olivera, quien mencionó que antes de usar cualquier producto cosmético o detectar alguna alteración se debe acudir al especialista.
Precisó que en el mercado existen varios productos para el crecimiento de las pestañas, sin embargo, éstos deben ser utilizados bajo supervisión médica, porque pueden ocasionar efectos secundarios como enrojecimiento, irritación ocular, visión borrosa y pigmentación. Un ejemplo de este tipo de productos son los derivados de la prostaglandina, sustancia que es utilizada para tratar el glaucoma. "El descubrimiento se hizo cuando a un grupo de pacientes con este tipo de problemas, se le aplicó un medicamento oftalmológico derivado de prostaglandina, que además de mejorar su visión tuvieron un crecimiento importante de sus pestañas", comentó.
Al ver esta situación, el laboratorio elaboró una presentación para su utilización de forma cosmética, sin embargo, no se puede usar indiscriminadamente, su aplicación debe ser supervisada por un médico, debido a que existen recomendaciones precisas de cómo se debe aplicar en las pestañas. Asimismo, indicó que este se debe usar por 12 semanas, y posteriormente, sólo el médico indicará la frecuencia y el lapso de tiempo de aplicación.
Finalmente, dijo que dentro del campo dermatológico este producto se usa para tratar patologías como la alopecia areata que consiste en la pérdida de cabello por zonas, por ejemplo, cuero cabelludo, cejas, pestañas, bigote, axilas y pubis. (Fuente: Secretaria de Salud de México).
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